ARGUMENTO
Inteligencia Artificial es una película dirigida por Steven Spielberg, que nos traslada al futuro para presentarnos una visión de los avances tecnológicos del mañana. En el mundo futuro que nos presenta el film, los seres humanos conviven con un grupo de androides tremendamente avanzados: Mecas. David (Haley Joel Osment) es un niño-robot creado por el profesor Hobby (William Hurt) y adoptado por Henry y Mónica, una pareja cuyo hijo se encuentra en estado de criogenización. El matrimonio programa a David para amar, creyéndose completamente seguros y conscientes de asumir las consecuencias. Sin embargo, no están preparados y, tras la recuperación de su hijo biológico, abandonan a David. A partir de este momento, el joven robot emprenderá una larga aventura en busca del Hada Azul, con el propósito de convertirse en un ser humano. Es entonces cuando entablará amistad con el gigoló Joe (Jude Law), junto a quien se salvará de ser exterminado en el ritual de la "Feria de la Carne".
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ELEMENTOS DE INTELIGENCIA ARTIFICIAL
En la película, aparecen ejemplos de Inteligencia Artificial muy compleja, que la ciencia actual se encuentra lejos de poder conseguir.
En primer lugar, encontramos a David, un robot con aspecto infantil creado por el profesor Allen Hobby, que supone un gran avance, pues es el primero con la capacidad de amar y transmitir sentimientos. David fue creado para poder sentir afecto y cariño hacia alguien, aunque estos sentimientos después desencadenarían en otros que el profesor no había previsto o esperado (rabia, deseo, desesperación…). David es un niño-robot que, consciente de sí mismo, a medida que avanza la historia, se obsesiona por ser un joven real; un niño “de verdad”. No obstante, es imposible obviar que es una máquina, que por muy perfecta o realista que aparente ser, no se puede equiparar a la biología que constituye al ser humano.
“Por fuera es tan real..., pero por dentro son sólo 1000 kilómetros de fibra óptica”
A continuación, podemos diferenciar como elemento de Inteligencia Artificial a los Mecas, androides aparentemente idénticos al hombre, pero con capacidades humanas inferiores que las que posee David. Entre los Mecas, destaca el gigoló Joe, quien ayudará a David a conseguir lo que desea.
Joe es un androide programado para seducir. Todos los Mecas son empleados por los humanos para servirles, y muchos de ellos terminan siendo destruidos en la "Feria de la Carne", verbena que busca acabar con lo artificial.
Joe es un androide programado para seducir. Todos los Mecas son empleados por los humanos para servirles, y muchos de ellos terminan siendo destruidos en la "Feria de la Carne", verbena que busca acabar con lo artificial.
En tercer lugar, encontramos al oso Teddy. Por su apariencia se asemeja más a un robot, sin embargo, cuando Mónica le presenta como un “superjuguete”, él responde: “No soy un juguete”. Y, verdaderamente, Teddy es algo más que un simple peluche infantil. El oso va a acompañar al protagonista y a aconsejarle durante todo el transcurso de la trama. Es un robot capaz de elegir, decidir, buscar a David, dar consejos, etc.
Posteriormente, se nos presentan los Mecas evolucionados, que entre otras cosas, son capaces de transferir energía y se ocupan de hacer realidad el deseo de David (ver a su madre).
Por último, cabe señalar el medio de transporte con en el que David y Joe viajan en la parte final del film: un "helicóptero submarino", capaz de trasladarles a donde ellos le indican sin titubeos ni más indicaciones.
Así como el Doctor Know, una máquina capaz de responder a determinadas cuestiones, que ayudará a David a encontrar al Hada Azul.
Así como el Doctor Know, una máquina capaz de responder a determinadas cuestiones, que ayudará a David a encontrar al Hada Azul.
IMPLICACIONES SOCIALES
Una de las implicaciones morales más trascendentes de Inteligencia Artificial es la capacidad de desarrollar sentimientos por parte de los androides, quienes no se relegan al papel de una simple máquina a la labor del hombre. El desarrollo de la capacidad de amar trae consigo una consecuencia ética evidente: se pierde el control sobre ellas. Como podemos observar en el film, a pesar de que la madre deja de lado a David, éste antepone sus sentimientos para reencontrarse con ella. Llegados a este punto, es necesario plantearse una cuestión: ¿Es lícito crear robots que posean sentimientos con el fin de agradar a los seres humanos para, posteriormente, despojarnos de ellos cuando ya no se nos antojen útiles? El hombre no puede manejar subjetivamente la sensibilidad de una máquina, ya que supondría una actitud egoísta, fría y calculadora por su parte. Además, el ser humano se situaría en un plano superior, configurándose como una especie de Dios con pleno poder sobre los derechos de los robots.
Asimismo, ¿nos sentimos lo suficientemente preparados como para asimilar que los androides sean capaces de amar? En la película, queda a trasluz como la familia es incapaz de relacionarse con David como si se tratara de un niño más; a la madre se le torna difícil acostumbrarse a ese cariño, hasta el punto de considerarle un objeto que, finalmente, abandona. No obstante, un factor decisivo en dicha asimilación es la apariencia. Lo que más llama la atención de David es su fisonomía y, por ello, juzgar su comportamiento humanoide parece menos ético que si se tratase de una máquina menos "humanizada".
Finalmente, otra reflexión ética que se plantea en el film es la eternidad: ¿es odioso ser mortales o la inmortalidad sería aún más dañina? David es capaz de sobrevivir más de 2000 años, todo su alrededor acaba muriendo y se queda solo. De este modo, considerando que vive eternamente, la vida de una persona querida (su madre) pasa a ser efímera dentro de la visión de sí mismo. Además, la inmortalidad siempre ha sido una peculiaridad perteneciente a los Dioses de la mitología antigua, tal y como relatan este tipo de leyendas; por lo tanto, el pensamiento de inmortalidad nos sugiere instantáneamente la idea de no humano.
En suma, ¿podrían ser los androides la continuación a la especie humana? ¿Son ellos el futuro?
En suma, ¿podrían ser los androides la continuación a la especie humana? ¿Son ellos el futuro?
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El robot,
ni come, ni bebe
ni juega al amor.
El robot no tiene bigote,
ni sexo, ni dote,
ni gran corazón [...]
"Mi amigo el robot", Gloria Fuertes
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Buena entrada, pero quizás demasiado plana la parte de inteligencia artificial
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